miércoles, 31 de marzo de 2010

Sigmund Freud y el Psicoanálisis.

Foto tomada de Wikimedia Commons, original de 1920 alojada en el archivo de LIFE.


Sigmund Freud revolucionó la historia de la Psicología, desarrollando una corriente que algunos llaman Psicología del Inconsciente aunque otros no lo consideran siquiera Psicología, sea como fuere podemos afirmar que Freud influenció marcadamente el desarrollo posterior de la Psicología y que el Psicoanálisis se hizo un lugar tanto en ambientes académicos como en la vida cotidiana.


Freud desarrolló sus teorías entre el último cuarto del siglo XIX la primera mitad del siglo XX, época convulsa y llena de cambios de todo tipo: académicos, Freud se enfrentó a la corriente cuasi-hegemónica de la Psicología de la Consciencia . Fue una época también convulsa en cambios socio-políticos, las dos grandes guerras y el surgimiento de corrientes políticas totalitarias que polarizaban la sociedad, teniendo el autor que moverse en un proceloso océano en el que, dada su condición de judío e intelectual librepensante tuvo que sufrir vicisitudes y exilio. Para concluir la contextualización, podríamos añadir que en esta época también se dan grandes cambios y debates socio-morales, ya que Sigmund Freud vivió en un entorno donde la moral tradicional y los tabúes respecto a la sexualidad influenciaron significativamente su carrera.

Como una de las ideas fundamentales de Freud tenemos la distinción de cualidades en los diferentes procesos psíquicos: consciente, preconsciente e inconsciente.

El autor no se detiene a describir lo consciente, ya que lo considera ampliamente definido tanto en lo académico, como en la vida cotidiana, se interesa mas por desarrollar la definición de lo inconsciente como todo lo psíquico restante, lo inconquistable. La visión de Freud sobre estas cualidades de lo psíquico es dinámica: el inconsciente puede tornarse consciente, hay una parte que puede ser susceptible de hacerse consciente de manera espontánea, a esta parte la define como preconsciente, por otra parte el resto del inconsciente puede ser susceptible de consciencia mediante el esfuerzo humano, todo proceso de toma de consciencia se enfrentará a fuertes resistencias .


Imagen de Jordangordainer tomada de Wikimedia Commons


La idea de un ser humano que no es totalmente dueño de sus actos, sino que está permanentemente sometido a pulsiones del inconsciente supone el núcleo fundamental de la corriente psicoanalítica, como lo definiría posteriormente Jaques Lacan a modo metafórico, Freud sería uno de los líderes del “partido de la sospecha”.

La sospecha de que lo observable en la conducta humana es solo “la punta del iceberg” supuso, y supone, un cuestionamiento de los enfoques académicamente aceptados como la Psicología de la Consciencia y otras corrientes posteriores basadas en el método experimental y de observación de conducta (el conductismo, que cuestiona incluso la existencia de la propia mente utilizando métodos de “caja negra” donde solo se miden imputs de estímulos y outputs de respuesta-conducta).



Después de Freud la psicología, tanto a nivel académico coma nivel popular, es diferente, las ideas de Freud pueden ser rebatidas por unos, apoyadas o revisadas por otros, pero marcan un hito ineludible.

La terminología, y los conceptos fundamentales que Freud puso en valor son utilizados por la mayoría de la población occidental, términos como complejos, inconsciente, ego, etc… forman parte de nuestro lenguaje cotidiano y median en las interpretaciones de los actos en la vida cotidiana.


En el mundo del arte la presencia del psicoanálisis es muy significativa, en corrientes como el surrealismo, pero también en producciones literarias y cinematográficas no enmarcadas estrictamente en el mismo (por no hablar de la televisión y otros mass-media). Todas estas producciones culturales y trans-culturales revierten asimismo en nuestra vida cotidiana.


Si bien se puede discutir a Freud y su obra una excesiva influencia y sesgo por la fuentes de su saber (pacientes enfermos de neurosis y por la sociedad restrictiva y reprimida en que vivía) es indiscutible que, una vez superada la prueba del tiempo y desarrollada su teoría y praxis por diferentes seguidores y escuelas posteriores, el psicoanálisis tiene mucho que aportar, construir y decir a día de hoy.


Para saber más:

http://es.wikipedia.org/wiki/Sigmund_Freud

2 comentarios:

  1. No soy entendido en psicoanálisis, pero tengo leído y escuchado a familias con hijos afectados, (ignoro si es tu caso)por alguna variedad de autismo que, la aplicación de las teorías freudianas y las de sus seguidores modernos, vienen a dogmatizar sobre la causa de estos síndromes achacándolo a los padres, hasta el punto de crear el concepto de "madres neveras" y lanzarlo como una bomba sobre estas personas que ya sufen lo suyo como para imputarles ser causa del síndrome. ¿Conoces y compartes esa teoría de origen freudiano?
    saludos/

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  2. Hola Scila, me alegra tu comentario, así podré aclarar algo que pasé por alto: no soy psicoanalista, soy Pedagogo, desde mi enfoque me centro sobre todo en las capacidades que tienen los individuos y no en su etiqueta de "discapacidad".

    Estoy radicalmente en contra del concepto de "madres neveras" o "madres congelador": no hay evidencia alguna de que esto sea verdad, de hecho mi experiencia es que las madres y padres de los niños con autismo son personas tan sensibles y afectuosas como cualquier otra (más si cabe). Gran parte de lo que se sobre autismo me lo han enseñado las propias familias.

    Con este artículo no pretendía aconsejar ningún tipo de terapia de base psicoanalítica, eso será decisión personal de cada uno, solo pretendía dar mi punto de vista (que evidentemente es limitado y parcial) sobre un personaje histórico polémico, que a pesar de sus muchos equívocos aportó una visión diferente.

    Recibe cordiales saludos.

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